lunes, 17 de noviembre de 2008

Tejido Conjuntivo

TEJIDO CONJUNTIVO
El tejido conectivo es el principal constituyente del organismo. Se le considera como un tejido de sostén puesto que sostiene y cohesiona a otros tejidos y órganos, sirve de soporte a estructuras del organismo y proteje y aisla a los órganos. Además, todas las sustancias que son absorbidas por los epitelios tienen que pasar por este tejido, que sirve de puente de comunicación entre distintos tejidos y órganos, por lo que generalmente se le considera como el medio interno del organismo. Bajo el nombre de conectivo se engloban una serie de tejidos heterogéneos pero con características compartidas. Una de estas características es la presencia de células embebidas en una abundante matriz extracelular, la cual representa una combinación de fibras colágenas y elásticas y de una sustancia fundamental rica en proteoglucanos y glucosamicoglucanos. Las características de la matriz extracelular son precisamente las responsables de las propiedades mecánicas, estructurales y bioquímicas del tejido conectivo. La clasificación del tejido conectivo en distintos subtipos depende de los autores pero generalmente se agrupan de la siguiente forma:


Conectivo propiamente dicho Mesenquimático
Mucoso o gelatinoso
Reticular
Elástico
Laxo o areolar
Denso

Conectivo especializado
Adiposo
Cartílaginoso
Óseo
Sanguíneo

Tejido adiposo
El tejido adiposo se puede considerar como un tejido conectivo un tanto atípico puesto que posee muy poca matriz extracelular, pero su origen embrionario son las células mesenquimáticas que dan lugar al resto de tejidos conectivos. Es un tejido especializado en el almacenamiento de lípidos gracias a unas células capaces de contener en su citoplasma grandes gotas de grasa: los adipocitos. Estas células, que también se pueden encontrar dispersas en el tejido conectivo laxo, se agrupan estrechamente en gran número para formar el tejido adiposo.
Los adipocitos se disponen formando lóbulos que están separados unos de otros mediante septos de tejido conectivo fuertemente irrigados por vasos sanguíneos. Las imágenes de microscopía muestran a los adipocitos como células huecas, con el citoplasma y el núcleo formando una banda estrecha en las proximidades de la membrana citoplasmática. Ello es debido a que los lípidos que contienen son eliminados con los solventes orgánicos empleados en el procesamiento del tejido para su observación.

Hay dos tipos de tejido adiposo: el formado por grasa blanca (o unilocular), cuyos adipocitos presentan una gran gota de lípidos, y el formado por grasa parda (o multilocular), con adipocitos formados por numerosas gotas de lípidos. El primero está presente en todos los animales mientras que el segundo es frecuente en los animales hibernantes y en los fetos de los mamíferos.

TEJIDO CARTILAGINOSO
Es uno de los principales tejidos de soporte, junto con el hueso. Su función es posible gracias a las propiedades de su matriz extracelular, la cuál es predominante en este tipo de tejido. El cartílago es una estructura semirígida que permite mantener la forma de numerosos órganos, la superficie de los huesos en las artículaciones y es el principal tejido de soporte durante las etapas iniciales del desarrollo, cuando el hueso aún no está formado. Es un tejido avascular y su matriz extracelular está formada fundamentalmente por colágeno, fibras elásticas y glucosaminoglicanos sulfatados. Las células que lo componen son los condrocitos que se localizan en pequeñas oquedades, denominadas lagunas, diseminadas por el tejido cartilaginoso.


Cartílago hialino de la tráquea de ratón.La mayor parte del cartílago, excepto el tipo de cartílago denominado fribrocartílago, está rodeada por una capa de tejido conectivo denominada pericondrio, que posee una capa externa de tejido conectivo fibroso formada por fibroblastos y fibras de colágeno y una interna condrogénica, donde se encuentran las células condrogénicas y los condroblastos que darán lugar a los condrocitos. Las células condrogénicas producen a los condroblastos y estos últimos son los responsables de sintetizar la matriz cartilaginosa. A medida que la sintetizan se van rodeando de ella y se transforman en condrocitos. Este crecimiento es por aposición. En el cartílago joven, sin embargo, los condrocitos pueden dividirse y contribuyen a la formación de matriz extracelular en lo que se denomina crecimiento intersticial.


Cartílago elástico de la oreja de ratón.Hay tres tipos de cartílago en el organismo: hialino, elástico y fibrocartílago. El cartílago hialino se encuentra rodeando a la mayoría de los huesos en las articulaciones, los anillos de la tráquea o el cartílago de la nariz, entre otros. El cartílago elástico contiene una gran cantidad de fibras elásticas, lo que le confiere la capacidad para estirarse sin romper su estructura, y se encuentra en ciertos lugares como epiglotis, canal auditivo y pabellón auditivo. El fibrocartílago se encuentra en lugares como los discos intervertebrales y ciertos lugares

TEJIDO ÓSEO
El óseo es el principal tejido de sostén y protección en los animales vertebrados. Pero además tiene otras funciones como almacén y regulación metabólica de elementos como el calcio y el fósforo, o la producción de las células sanguíneas mediante un proceso denominado hematopoyesis, ya que aloja los elementos hematopoyéticos de la médula ósea. Su componente más característico es una matriz extracelular mineralizada formada por cristales de hidroxiapatita (fosfato cálcico cristalizado), por una gran abundancia de fibras de colágeno (sobre todo el tipo I) y por glucosaminoglicanos en menor cantidad. Esta composición confiere al tejido óseo una gran consistencia, dureza, resistencia a la compresión y cierta elasticidad. Según la densidad de la matriz extracelular hablamos de hueso compacto cuando es muy densa o de hueso esponjoso cuando presenta numerosas oquedades que le dan un aspecto más laxo. Las células que constituyen el hueso maduro se denominan osteocitos. El hueso está en continua remodelación. Las células encargadas de destruir hueso se denominan osteoclastos, mientras que su formación se lleva a cabo por los osteoblastos, que van quedando encerrados en cavidades de matriz extracelular y se convierten en osteocitos. Al contrario que el cartílago, el hueso es un tejido fuertemente irrigado por el sistema sanguíneo.


Osteona de hueso compacto. El hueso esponjoso se encuentra por lo general en el interior de los huesos, como el interior de la epífisis o en la cabeza de los huesos largos, siempre rodeado por hueso compacto. Posee grandes espacios abiertos, denominados cavidades vasculares, ocupados por vasos sanguíneos y elementos hematopoyéticos y que están delimitados por trabéculas óseas compuestas por capas de matriz extracelular y células óseas dispuestas de manera ordenada en capas bien diferenciadas. A estas capas se las llama laminillas óseas. El hueso compacto no posee cavidades vasculares, sino que su matriz extracelular se ordena en laminillas óseas que se disponen de manera concéntrica alrededor de un canal por donde discurren vasos sanguíneos y nervios. Este canal se llama canal de Havers. Del orden de 4 a 20 laminillas óseas se disponen alrededor de un canal de Havers para formar la unidad estructural de este tejido que es la osteona o sistema de Havers. Los osteocitos se encuentran en unos huecos localizados en las laminillas óseas denominados lagunas. De estas lagunas salen pequeños conductos denominados canalículos por donde los osteocitos emiten prolongaciones celulares. Los canalículos se abren a los canales de Havers por donde viajan los vasos sanguíneos, y desde donde los oseocitos obtinen los nutrientes.

Las cavidades interiores o medulares del hueso compacto, así como las cavidades vasculares del hueso esponjoso, están recubiertas por el denominado endostio, que contiene células osteogénicas, osteoblastos y algunos osteoclastos. Recubriendo al hueso externamente se encuentra el periostio formado por una capa externa de tejido conectivo fibroso y por otra capa más próxima al hueso que contiene material osteogénico, donde se encuentran los osteoblastos. Esta envuelta se encuentra sujeta al hueso mediante haces de colágeno embebidos en la matriz ósea calcificada.

TEJIDO SANGUÍNEO
La sangre se encuentra en el interior de los vasos sanguíneos y el corazón, y circula por todo el organismo impulsada por el corazón y por los movimientos corporales. Entre sus principales funciones está la de transportar nutrientes y oxígeno desde el aparato digestivo y los pulmones, respectivamente, al resto de las células del organismo. También se encarga de llevar productos de desecho desde las células hasta el riñón y los pulmones, y de mantener homogéneamente la temperatura corporal. Entre sus células se encuentran las que forman el sistema inmunitario, que utilizan el torrente sanguíneo y la red de vasos sanguíneos para viajar a cualquier parte del organismo y defendernos frente a las enfermedades.


Células que componen la sangre de los humanos. La sangre es un tipo especializado de tejido conectivo compuesto de células, fragmentos celulares y una matriz extracelular líquida denominada plasma sanguíneo. Las células sanguíneas se clasifican en dos tipos: eritrocitos o glóbulos rojos y leucocitos o glóbulos blancos. La sangre también contiene fragmentos celulares denominados plaquetas. Los leucocitos se dividen a su vez en granulares: neutrófilos, basófilos y eosinófilos, y en agranulares: linfocitos y monocitos.

El plasma es el componente fluido de la sangre y representa más de la mitad del volumen sanguíneo. Está formado por multitud de moléculas, desde iones hasta proteínas voluminosas. Es el principal medio de transporte de nutrientes y productos de desecho.

No hay comentarios: